Páginas
▼
28 de junio de 2014
26 de junio de 2014
LA CEBADA AL RABO
Oriundo de Castilla-León, hoy nos visita DANIEL DE CULLÁ, poeta, escritor, pintor y fotógrafo y que en la actualidad participa en espectáculos donde se funden la música, el teatro y la poesía. ¡Bienvenido, Daniel, A "La cebada al rabo"
FOTO DE TATIANA KORONOBA |
¡MI NIÑO, QUE MONADA!
La Tomasa de Villalbilla, lugar cerca de Burgos
Tradicional donde las haya
Y persuadida de holgazanes
Lleva un palo debajo de la falda
Como le dicen las malas lenguas
Que llevan los indignados
En las manifestaciones
Para cuando viene algún forastero
Y se llega a ella con disimulo
Tocándole el culo
Preguntando:
¿De qué partido eres, Tomasa?
Respondiéndoles ella
Dándoles tres o cuatro palos:
“yo soy del palo y tentetieso
Como los del gobierno
Y la religión
-Daniel de Cullá
Daniel de Cullá, (59 años), de origen castellano aragonés. Poeta, escritor, pintor y fotógrafo. Miembro de la Asociación Colegial de Escritores de España, Miembro fundador de la revista literaria “Gallo Tricolor”. En la actualidad, participa en espectáculos que funden poesía, música y teatro. Ha dirigido la revista de Arte y Cultura “Robespierrre”.Participé con mis obras artísticas en la
Exposición Cuerpo & Alma, celebrada del 2 al 23 de Mayo de 2014 en la
Sala de Exposiciones de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de
Cuenca (Ecuador).
Participo en la BIENAL DE POESÍA EXPERIMENTAL DE EUSKADI ex!poesía 2014
Exposición Cuerpo & Alma, celebrada del 2 al 23 de Mayo de 2014 en la
Sala de Exposiciones de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de
Cuenca (Ecuador).
Participo en la BIENAL DE POESÍA EXPERIMENTAL DE EUSKADI ex!poesía 2014
22 de junio de 2014
COMENTANDO FRASES EXTRAÍDAS DE “Rumbo a Gaia”
3ª frase.- “La prisa no nos
permite hacer una buena planificación de nuestros actos”.
Es la frase de nuestros días: “No tengo tiempo” No tengo tiempo para estudiar otra cosa, no tengo tiempo para llamar a mis
amigos, no tengo tiempo para visitar a mis padres, no tengo tiempo para jugar
con mis hijos… El etcétera
que sigue es tan largo como la actual desconsideración hacia los valores
tradicionales o la estupidez humana que, a decir del buen Einstein, es
infinita.
En base a esa muletilla tan poco
afortunada, pocas cosas se hacen si no es acompañadas de la prisa y, se
olvida con frecuencia que no todos los valores se centran en el supuesto oro
que atesoramos con el tiempo.De este modo, planificamos mal, insuficiente e
inconsecuentemente; y, porque no teníamos tiempo de revisar el coche, sufrimos
un accidente; porque no había tiempo para dar explicaciones, se creó el
malentendido; porque no había tiempo para alimentar la llama, se nos murió el
amor repleto de vacío…
Y de nada nos
sirven las alusiones que al respecto podemos encontrar en la literatura. De
entre ellos, os dejo la primera vez que un texto me hizo reparar en la
importancia de, no ahorrar mi tiempo, sino de gastarlo con el goce y el
disfrute. Pertenece a “El principito” de Antoine de Saint Exuperi y dice así:
21 de junio de 2014
LA CEBADA AL RABO
RAFAEL ANGULO MESA es nuestro visitante de hoy que nos llega desde la bonita ciudad de Sevilla en la que vive en la actualidad. Pronto tendremos la ocasión de leer su primer libro "Poesías de mi ayer"
SUEÑOS ...
Vengan a él tiempos pasados
Que fue muy dulce el vivir
Y ahora es muy triste existir
Viviendo siempre apenado
Siempre el pensamiento triste
Vagando va por el mundo
Con un pesar muy profundo
Recordando lo que fuiste
Su vida es, cuanto sueña
Sueños siempre del ayer
Ni su preciosa mujer
Es de sus sueños la dueña
Ya no le importa el destino
Ni el dinero, ni amores
Solo piensa en bellas flores
Que adornaban su camino
17 de junio de 2014
COMENTANDO FRASES EXTRAÍDAS DE "Rumbo a Gaia"
El miedo o temor es
una emoción caracterizada
por una intensa sensación, habitualmente desagradable, provocada por la
percepción de un peligro, real o supuesto (la definición es de Wikipedia).
Cuando yo era pequeña, mi madre me amenazaba:
“Si no comes, me muero”. Y fingía desvanecimiento hasta que yo, desleída en
llanto, prometía que me lo comería todo. A otros niños se les asusta con el
Coco, el Brujo, el Momo, el Sacamantecas, El hombre del saco y un largo
etcétera que van abonando el campo para, en definitiva, hacerse con la voluntad
infantil. Eso es lo que hacen los que nos quieren…
Hechos ya seres temerosos, es fácil acumular
miedo a: la oscuridad, lo desconocido, las alturas, los lugares estrechos, los
cerrados… Cada finalidad a conseguir tiene sus medios particulares para mermar
la capacidad del individuo y hacerse con su voluntad. Luego, unos se superan y
otros, no. Yo, por ejemplo, aprendí enseguida que mi madre “resucitaba” si le
birlaba el monedero del bolsillo del delantal y me largaba con él y con viento
fresco. De una forma intuitiva estaba intentando afrontar el miedo y me salió
bien.
No conozco otra forma de superar los miedos
que afrontándolos y eso, la mayor parte de las veces, se consigue con la
información y el conocimiento adecuados. También perdí el miedo a las
salamanquesas cuando supe dos cosas: que si me salpicaba su saliva no me iba a
quedar ciega como decía la creencia popular y que eran un benéfico animal que
comía mosquitos y nos libraba de ellos.
Se han escrito cientos de libros sobre el
miedo y, excepto los que a mi escaso entender lo confunden con la precaución
(que esa sí es necesaria para salvaguardar al individuo), nadie defiende sus
bondades.
Y eso es lo que, en multitud de ocasiones,
los Guías aconsejan a las pequeñas almas que se preparan para venir a la
Tierra: no cosechar miedo, vencerlo mediante la información, aprender a pensar
como nosotros queremos y no como quieran los demás porque no hace sino
propiciar nuestra esclavitud, el fácil dominio sobre nuestras voluntades y
cuando menos, porque “El miedo embota la mente y recorta los recursos”.
A seguir pensando, amigos.
Antonia María Carrascal.
COMENTANDO FRASES EXTRAÍDAS DE “Rumbo a Gaia”
1.
No
podríamos valorar verdaderamente la conveniencia de la luz si no conociéramos
las dificultades de la sombra.
Ya
sabéis que “Rumbo a Gaia” es una novela para leer desde los doce a los ciento
veintidós años. A lo largo de sus páginas no hay mejor cometido que el de
lograr los ocho objetivos que publiqué ayer en mi post anterior.
A
veces, por maduros que nos consideremos, nos rebelamos ante la adversidad, y
frases como: “Todo me tiene que tocar a mí” o “¿Qué habré hecho yo para merecer
esto?”, se enredan a los labios, obnubilan la mente, atenazan el corazón y, lo
que es peor, sirven como excusa para no luchar, aceptando, sin más, que lo
bueno, lo disfrutable, lo placentero nos está vedado. Nos acostumbramos así a un
estado de ánimo que impedimenta todo goce. Total, ¿para qué te vas a alegrar,
reír, congratular…, si crees firmemente que a continuación la desgracia se
volverá a cebar en ti anulando el placer que produjo lo bueno? “¿Ves todo lo
que me estoy riendo? Pues más voy a llorar —he oído decir a alguna gente.
Cuándo
nos planteamos profundizar en la esencia de lo que nos acontece, resulta
valioso si lo comparamos con su antagónico. No se aprecia con más placer el
agua que desde la más intensa sed, ni la frescura después del calor o el abrigo
cuando estamos ateridos.
¿Por
qué entonces, cuando sufrimos un revés de cualquier índole, ni siquiera
pensamos en la posibilidad de que, después del acontecimiento doloroso, hemos
ganado algo bueno?
¿Que
qué es eso bueno? Cada cual saque sus conclusiones. A mí se me ocurren de
momento: fortaleza para saber encajar los reveses, madurez para enfocar algo
distinto; creatividad, comprensión, dinamismo...
Yo
tengo mi frase que me ayuda en los momentos difíciles: “Experiencia que no
mata, enriquece”. Se trata en definitiva de lo que dice la frase que hoy he
extraído para vosotros:
No podríamos valorar verdaderamente la
conveniencia de la luz si no conociéramos las dificultades de la sombra.
Ea,
pues a reflexionar…
Antonia María Carrascal
COMPRAR "RUMBO A GAÍA"
"Rumbo a Gaia" ya ha llegado y empieza a moverse por todo el planeta. Ayer viajó a Vizcaya. ¿A dónde irá esta vez? Ya puedes comprarla en esta dirección.
Ya está disponible la pasarela Paypal para adquirir RUMBO A GAIA.
http://antoniamariacarrascal.blogspot.com.es/p/comprar-rumbo-gaia.html
http://antoniamariacarrascal.blogspot.com.es/p/comprar-rumbo-gaia.html
11 de junio de 2014
LA CEBADA AL RABO
Esta noche, "La cebada al rabo" se viste de gala. El escritor, poeta y conferenciante que esta noche nos visita es de rancio abolengo en el andar literario porque, a su excelente quehacer poético como nos demuestra envolviendo su aporte en un soneto perfecto, ha de añadirle infinidad de cargos como reconocimiento de su larga dedicación a la literatura y su excelencia en la misma. Queda con nosotros pues, don JOAQUÍN FERNÁNDEZ GONZÁLEZ.
AQUEL BESO QUE ESPERO
No me besaste anoche que, dormido,
ansiaba que tu luz apareciera;
ni tu silueta, ni tu voz siquiera,
regalaste a mi cuerpo dolorido.
Soñar; sólo es así como he podido
revivir ese amor que yo tuviera;
no has venido las veces que quisiera
y buscarte en el cielo no he sabido.
El sueño es un enigma que me inquieta;
es el hogar del alma y la secreta
morada del que sufre y se disloca.
Y siempre al despertar he deseado
comprobar si esa noche me has dejado
el sabor de tus labios en mi boca.
JOAQUÍN FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, nace en Málaga en 1924; pertenece a la Academia Iberoamericana de Poesía desde 1993 asignándole la letra B; es escritor, poeta y conferenciante; Caballero de la Orden del Cister; Ex-
RUMBO A GAIA
COPIO AQUÍ LA PREGUNTA DE UN AMIGO
Hola, Antonia. ¿Se puede comprar "Rumbo a Gaia"? ¿Qué hay que hacer?
RESPUESTA
Hola, gracias por interesarte por mi novela. En un par de días tendré todo listo para
que puedas adquirirla a través de pay pal.
Un abrazo.
Hola, Antonia. ¿Se puede comprar "Rumbo a Gaia"? ¿Qué hay que hacer?
RESPUESTA
Hola, gracias por interesarte por mi novela. En un par de días tendré todo listo para
que puedas adquirirla a través de pay pal.
Un abrazo.
RUMBO A GAIA
SINOPSIS DE LA NOVELA RUMBO A GAIA
Clara conduce enfadada por una carretera costera harta de una vida monótona
que no le proporciona lo que ella desea
Cuando una ola descomunal salta el malecón y empuja su coche volcándolo, Clara observa sus pies atrapados mientras su conciencia se sume en un mundo de tinieblas que la lleva al espacio no tiempo en que era un alma recién creada que se prepara junto con un grupo para hacer su primera encarnación en la Tierra.
Cuando una ola descomunal salta el malecón y empuja su coche volcándolo, Clara observa sus pies atrapados mientras su conciencia se sume en un mundo de tinieblas que la lleva al espacio no tiempo en que era un alma recién creada que se prepara junto con un grupo para hacer su primera encarnación en la Tierra.
Una novela de tema original y gran ternura que abre una puerta de comprensión a cada vida
y a los acontecimientos que ocurren en ella, pues todos tienen una razón de
ser, y sólo a través de las experiencias es posible alcanzar la madurez. A lo
largo de toda la obra está presente el valor de la Vida en toda su dimensión
RUMBO A GAIA
HABLEMOS UN POQUITO DE GAIA, LA MADRE TIERRA
Según la hipótesis de Gaia, la atmósfera y la parte
superficial del planeta Tierra se comportan como un todo coherente donde la
vida, su componente característico, se encarga de autorregular sus condiciones
esenciales tales como la temperatura, composición química y salinidad en el
caso de los océanos.
La hipótesis propone que los
organismos vivos y las materias inorgánicas de nuestro planeta forman parte de
un sistema dinámico que da forma a la biosfera de la Tierra. La propia Tierra se
considera un organismo con funciones autorregulatorias.
Me vais a permitir que os comente
un acontecimiento que refuerza esto que digo.
10 de junio de 2014
RUMBO A GAIA
Portada recién salida de las manos del ilustrador José Bravo. |
¿CÓMO NACIÓ “RUMBO A GAIA”?
Nunca antes había escrito una novela (después, sí). ¿Por qué?
Pues porque no me consideraba novelista. Desde siempre fui poeta y nunca me
había imaginado tener el aguante suficiente como para no terminar en el mismo
día aquello que escribiera. El poema se escribe y, como todo arte, se deja “en
barbecho” durante un tiempo. Luego se retoma y se trabaja una, mil veces,
hasta que se aproxima bastante a nuestro propósito. Bastante. Nunca se llega
del todo a lo que tienes en el corazón;
pero, de esa eterna insatisfacción, ya saben todos los que son artistas.
La novela, sí. Estaba hablando de mi primera novela…
Un golpe duro me hizo buscar con ahínco en todas las
manifestaciones de la Metafísica en busca de las razones que no me daban las
creencias que hasta ese momento había profesado. |
8 de junio de 2014
LA CEBADA AL RABO
Desde Argentina nos llega el relato de MARTHA ALICIA LOMBARDELLI. Una escritora y filósofa con abundante biografía de dedicación a ambas disciplinas. Ha sido invitada a participar en un sinfín de acontecimientos en pro del arte y la cultura, incluso fuera de su país. Ya acabado su cometido docente en la Universidad, ahora dedica su tiempo a su otra pasión: la literatura. Gracias, Martha, por visitar "La cebada al rabo"
Prólijo relato de un día de ira en la vida de Alicia
Ceci n'es pas une
pipe
René Magritte
Ahora
había que borrar todo rastro de lo que realizó en un momento de ira. No era
para menos, el lado exterior de la casa mostraba un montón de vidrios rotos,
justo debajo de la ventana. La misma que había estado limpiando el día
anterior: desde temprano se consagró a esa tarea. Medía un metro por uno
ochenta de ancho, con vidrios corredizos, tenía marcos de aluminio y cortina de
enrollar de plástico. Una joya de la construcción moderna: jamás se deformaba,
no necesitaba que le renovaran la pintura para que la madera no se resecara, no
se hinchaba ofreciendo resistencia al querer cerrarla cuando había humedad.
–Es
inalterable –le dijo con seducción el vendedor cuando fue a comprarla.
Sí, era
casi inalterable; sólo había que frotar sus marcos para que el brillo del
aluminio no se opacara cuando –por descuido- quedaban expuestos sin la
protección de la cortina de enrollar. Esta última era como un párpado celoso de
la pulcritud del interior de la ventana. Resguardaba amorosamente detrás de su
blancura el brillo de los marcos y la transparencia de los vidrios. Así,
impecable, deseaba que sus parientas encontraran la casa. Conocía la costumbre
que tenían:
– ¿Te
fijaste el color de pelo que tiene Alicia?
–No le
sienta ese color.
– ¡Ni ese
ni ningún otro! Porque tiene un pelo horrible, se nota reseco; igualito a paja
de escoba
–¿Y qué te
parece la limpieza del piso?
–Ni
hablar; se ve que ha limpiado todo sin cambiar ni una sola vez el agua del
balde.
4 de junio de 2014
LIBROS RECOMENDADOS
TODAS SON BUENAS CHICAS
por Néstor Belda
ME HA LLEGADO. ME HA LLEGADO, POR FIN ME HA LLEGADO CON UNA
ENTRAÑABLE DEDICATORIA Y UN MARCAPÁGINAS PARA COLECCIONISTAS. GRACIAS, NESS POR
APORTAR CALIDAD A LA LITERATURA.
Diez relatos componen este libro que no debe faltar en tu biblioteca
3 de junio de 2014
Desde mi tierra natal, Sevilla, nos llega hoy la colaboración de un escritor de Huelva. JOSÉ RODRÍGUEZ INFANTE ha tenido hoy la deferencia de dejar las ocupaciones que le ocasiona la aparición reciente de su última novela "Cuando los bosques mueren", y enviarnos su colaboración. Gracias, José.
HOMBRE PEGADO A MÓVIL
Se levantó por la mañana y notó
algo extraño en la oreja; como aún no estaba bien despierto, no tuvo fuerzas
para mirarse al espejo, así que encaminó sus pasos a la cocina, preparó la
cafetera y mientras templaba la leche en el microondas, se acordó que tenía que
llamarla. Puso la cafetera y preparó la tostadora, descolgó el teléfono pero no
se acordaba del número: necesitaba el móvil para mirar en la agenda; el
microondas emitió un pitido, volvió a darle, colocó la rebanada de pan, se fue
al salón a buscar el móvil, olía a café recién hervido; no aparecía el móvil,
se fue a la salita y desfondó el sofá; la tostadora lanzó las rebanadas de pan
en la encimera, en la cocina olía a café requemado, volvió al dormitorio y
buscó entre las sábanas y el edredón; se le estaba pasando el hambre. Se fue a
la ducha y escuchó un fuerte chasquido como de explosión, abrió el grifo pero
reaccionó rápido y corrió a la cocina: cortó directamente el térmico del cuadro eléctrico, cerró el grifo
de la ducha y volvió a meterse en la cama tapándose la cabeza con un cojín; en
ese momento sonó el móvil, se activó el reconocimiento de voz y allí estaba
ella. Por fin sus músculos encontraron laxitud.